En España existen una cantidad de festivales de cine abrumadora. Si uno tuviera la vida resuelta o trabajara para algún medio de comunicación que le facilitara manutención y alojamiento podría perfectamente pasarse todo el año circulando por el país asistiendo a cuantos eventos fílmicos se programaran (una utopía como una catedral en lo que a mi persona se refiere). Los tenemos de toda índole: dedicados al cine español, al de barrio, al clásico, al de acción, al latinoamericano… por eso es digno de aplauso cualquier atisbo de originalidad que podamos hallar en alguno de estos certámenes, y hoy miércoles el Festival de Cine d´Autor nos ha sorprendido gratamente con una novedad de la que se ha de tomar nota. Una avanzadilla de las votaciones que el público ha ido dejando a la salida de cada proyección. Tenemos en nuestras manos una clasificación general donde ya se atisban los que pueden ser films ganadores cuando esta primera edición finalice el domingo. Por ahora la película con más posibilidades de alzarse con el premio del público es Pequeñas Mentiras sin Importancia (2010), cinta que inauguró el festival y que parece que ha calado hondo en la retina de los espectadores, con una nota de 3´89 sobre
Hoy hemos disfrutado de la visita de la directora Mia Hansen-Love presentando la emotiva y desarmante El Padre de mis Hijos (2009), de la que ya hablamos hace unos días. El film fue Premio Especial del Jurado en la sección Un Certain Regard del Festival de Cannes 2009. Mia es una joven directora que se dio a conocer como actriz en Finales de Agosto, Principios de Septiembre de Olivier Assayas, y que debutó como realizadora en 2007 con Tout Est Pardonné. A parte de esta gratificante cita, el público también tenía la oportunidad de acudir al segundo pase de la rusa Wild Field, o decantarse por la maratoniana película rumana Aurora, de Cristian Puiu.
Mi breve jornada de hoy comenzó a las seis de la tarde apoyando al documental patrio. María y Yo no es precisamente un film de riguroso estreno, ya que lleva más de un año de recorrido atesorando diversos premios en festivales como el Rec de Tarragona e incluso ya se ha editado el dvd, pero si alguien todavía no ha tenido la oportunidad de ver este retrato realista y conciso de un tema tan delicado como es el autismo que sepa que se está perdiendo un gran trabajo. Se trata de una obra breve, teñida de un sentido del humor muy humano, fruto de las divertidas situaciones que se crean cuando una persona con esta enfermedad tiene que entenderse de una u otra manera con el mundo que le rodea. También es una delicada e impecable narración por parte de Félix Fernández de Castro, que pasa de puntillas por las vidas del dibujante Miguel Gallardo y su hija María, introduciéndonos con actitud de entomólogo en una cotidianeidad cargada de responsabilidad y generosidad (la paciencia con que el padre afronta el autismo de su hija te pone los pelos como auténticas escarpias). Lo más sorprendente es la forma en que los padres de María asumen, desde una racionalidad inusual, la problemàtica de su hija con una firmeza y una resignación positiva que luego les permite edificar una ayuda consistente y eficaz.

